Un verso susurrado,
palabras en tu oído,
te digo como las siento:
suaves, apagadas, dulces.
Las palabras susurradas,
que fluyen, se mueven,
nacen y me abandonan:
y allí estás tú, su captora.
Cogiendo cada palabra,
tornándola a sentimiento:
proceso inverso el tuyo,
alcanzando el equilibrio.
Para ti, que tanto me das: para ti, que siempre estás.
Gracias...
ResponderEliminar:-D
ResponderEliminarAna: a ti. :-) Siempre a ti. ;-)
ResponderEliminaragente_naranja: ahora seguro que planeas un relato en el que muere asesinado alguien que hace poemitas cursis ... ¬¬
Felicidades.
ResponderEliminarAnónimo: ¿a quién? ¿y por qué? Un mensaje demasiado conciso, me temo.
ResponderEliminarA ti, por estar mejor.
ResponderEliminar¿Mejor de qué? ¿Y quién eres tú?
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