Presagio

Una nube en mi estomago:
así te presagio siempre,
quemazón en mi sangre,
evidencia de mi deseo.

Inundada mi mente,
naufragada mi consciencia,
el temer en mi alma:
perderme para siempre.

El agobio es mi compañero,
imperturbable en el tiempo,
la agonía mi única guía,
lazarillo de mis penas.

Verte tan sólo segundos,
rozarte un breve instante,
olerte aquel corto segundo,
desearte para siempre.

Trabajando de nuevo con la Musa...