viernes, agosto 15, 2008

Gemidos

Inquietantes, sugerentes, tus gemidos,
buscándome para atraparme otra vez,
lanzados desde lo hondo de tu pecho,
allí dónde tu respiración se agita.

Tus gemidos, captores de mi deseo,
me han hecho prisionero con su sonido:
ahora ya no puedo más que acompañarlos,
dulce obligación la que me imponen.

Siguen su ritmo los míos, impacientes,
salvando distancias para ahogarme,
en el mar de tu pecho voluptuoso,
con su tempestad que remueve mi ser.

Y me sumerjo en sus aguas, no nado,
profundizo en tus formas, no floto,
me hundo en el deseo de tu cuerpo,
tumba húmeda de una pasión turbadora.


Para Xelo, haciendo las prácticas de musa ;-)

No hay comentarios:

Publicar un comentario