Absurdos

Soy consciente de que para ser un blog de Linux poco se habla de él. El sábado me instalé Debian Etch (aun no es estable). Está muy bien. Muy fácil de instalar (siempre comparo cualquier instalación de ahora con la de aquel Debian Woody ...). Estoy pegándome aun con los repositorios de apt. Necesito codecs. Logré que funcionase el automontaje de dispositivos con HAL y pmount.
Tengo el ratón configurado para zurdos en un Xfce 4.4.0 plenamente funcional. Me gusta.
Echo de menos a C. No dejo de pensar en ella. Quiero morirme a cada instante, no sé si porque me rechazó o porque no está. El que no estoy soy yo. Soy un recipiente vacío. Hueco. No estoy.
Me empieza a importar una mierda que se hunda el país. ¿Qué sentido tiene ahora para mi un futuro?
Sólo me preocupa ella.
Me he vuelto loco.
Cada instante en mi mente es ella. Sólo siento cuando pienso en ella: siento en cada momento. Tristeza, una amarga y profunda pena: la agonía de cada segundo sin ella. Aunque ella nunca estuvo. No estoy yo tampoco. Soy humo, vapor. ¿O sólo soy un reflejo?
Ya no soy persona. Soy un espejismo.
Joder, te quiero.
Aunque ahora quiero morirme.
No sé qué deseo más ahora.
Soy patético. Me volaría la cabeza para acabar con esta mierda. Bah ... igual que viene se va. Blanco, rojo, negro. Vacío.
Tecnología. Software. Me puedo pegar con el software, pero al final gano yo. Ojalá pudiera lograr lo mismo con ella: saber que puedo ganar la batalla. Sólo que no hay batalla.
Datos, esquemas, breves análisis, conocimiento técnico. Sólo soy bueno para las putas computadoras.
Tengo 3 cicatrices en mi cabeza producidas por pedradas. De niño no era muy popular. Hasta que aprendí a que me temiesen. El terror funciona si no eres como ellos. Si no te putearán.
Estarás solo igualmente, pero al menos te dejarán en paz.
Desvarío. Divago. No me importa.