martes, septiembre 19, 2006

Parpadea

Parpadea la ventana, se vierten letras formando palabras. Un torrente dañino de letras conteniendo ideas, expresando sentimientos, opiniones. Como cuchillas.
Cuchillas que cortan no mi piel, sino mi alma, cuchillas que desgarran mi corazón, que siembran el desánimo. Cuchillas hirientes.
Los cortes sangran, sangrarán un tiempo, pero cicatrizarán, y serán estas cicatrices las que me recuerden que he de olvidar que existes. Como medallas de una guerra olvidada, esas cicatrices se quedarán para siempre, para recordarme que te odie, que te desprecie, que te ignore.
Serán la marca, el recuerdo constante de que has de desaparecer.

4 comentarios:

  1. El odio es demasiado fuerte y, con o sin él, el olvido no existe... el olvido se espera pero nunca llega, el olvido muestra su ausencia en las cicatrices que dejan los momentos y los lugares, que dejan en los pies las piedritas del camino... pero hay piedritas que son preciosas y el olvido para con ellas es aún menos existente jeje :P
    Te quiero!!!

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  2. Es hermoso lo que has escrito, maluquenia. Tú no serías una piedrita: serías un diamante.
    Ya sé que me quieres: me encanta. ;-)

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  3. me encanta que te encante... me encanta que te guste lo que escribo... no puedo decir otra cosa, pues es verdad que te quiero... te quiero y me gustaría... tu me entiendes no? :P

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  4. No. No te entiendo. ¿Por qué iba a querer entenderte? :-P

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